El miércoles 8 de junio el Centro de Estudiantes (CEE) del colegio organizó el “Conversatorio de Sostenibilidad en el Siglo XXI”, actividad que conto con tres exponentes: Julio Ortega, doctor investigador de la Escuela de Ingeniería de la PUCV; Claudia Fuentes, la Coordinadora de Proyectos del Centro de Acción Climática de la PUCV y la doctora Valeria Campos, del Instituto de Filosofía de la PUCV, a los que asistieron estudiantes de diferentes establecimientos educacionales de Valparaíso.

El conversatorio comenzó con las palabras de agradecimiento de la rectora, señora Daniela Navarro Olivos, para el Centro de Estudiantes, a quienes instó a ser protagonistas del cambio y creadores de una conciencia ambiental ecológica.

La primera en exponer de los invitados fue la doctora en Filosofía Valeria Campos, quien habló de una frontera límite que el ser humano constantemente la está transgrediendo, un privilegio político y jurídico solo para algunos y que ha tenido sus consecuencias, que es el Antropoceno, que es la crisis que estamos viviendo, donde el ser humano ha sido parte del cambio climático, la destrucción de la biodiversidad y el consumo excesivo de recursos naturales. “Es un momento crítico, queremos incluso imponerle las leyes a la naturaleza”, dijo y concluyó que somos parte del problema y la solución pasa también por nosotros, concluye la docente de PUCV.

En tanto, Julio Ortega, hizo un pequeño recorrido por las diversas energías, para concluir que las energías limpias son las respuestas que el hombre está buscando para un desarrollo sostenible, como la solar y la eólica, entre otras. Lo que sí dejó claro es que un proyecto de energías limpias debe ser fiable, ya que la mayoría de las iniciativas debe impactar a un número mayor de personas para que se puedan realizar.

Finalmente, la académica Claudia Fuentes, se refirió más a la dimensión social de la crisis ambiental y sus roles, al señalar que hay una reconfiguración de las fuerzas, movimientos ecologistas y feministas, que han comenzado a cuestionar el modelo, una nueva corriente ecofeminista, que se está reorganizando, bajo una lógica distinta de subordinación, como parte de los roles sociales que están llamados a liderar los cambios. “La idea del desarrollo sustentable pasa más porque tengamos una buena calidad de vida, al igual que las futuras generaciones”, concluye.